miércoles, 5 de septiembre de 2007

Y bue

Podemos echarles la culpa a los políticos, al calentamiento global, a la alineación de los planetas o a bailando por un sueño, pero si analizamos un poquito, en realidad los verdaderos culpables de esta sociedad destruida. Y gran parte del por qué de esta afirmación es nuestra terrible adicción a la comodidad. Incluso lo que decía antes, de echarle la culpa a alguien más, es cómodo y conveniente. Siempre buscamos un culpable porque es más fácil que asumir la culpa.


Es muy probable que las frases “y bue” y el “dejalo así” sean las piedras fundamentales de nuestra sociedad en estos días. La falta de ganas de hacer las cosas y el conformismo pueden llegar a ser probablemente la causa de muchos de nuestros problemas de hoy. Hasta me puedo dar el lujo de no dar ejemplos esta vez, pero sería seguir con esta cadena de falta de ganas de hacer las cosas.


Seamos sinceros muchachos, ¿quién no estubo con alguien alguna vez sólo por el hecho de estar con alguien? (otra vez un ejemplo con minas), ¿o quién no se puso a buscar otro trabajo aunque el suyo actual era detestable, simplemente porque no tenia ganas de hacer dos clicks con el mouse? Y estos son ejemplos que nos afectan a nosotros, imaginense cuando alguien tiene que hacer algo para los demás, un empleado público, la persona que te atiende en el banco, el policia que tiene que cuidar a la gente y por supuesto el ejemplo obvio de los políticos. Imaginen que poco hacemos por los demás si nos da fiaca hacer algo por nosotros mismos. Por más vuelta que le demos no tenemos otra explicación, vivimos en una sociedad de mierda, porque nosotros hacemos que esa sociedad sea una mierda.


Igual esta página, más alla de que a veces lo haga, no esta para levantar un dedo acusador ante nadie, pero el tema es que la situación no queda así. Porque no esta mal tirarse a chanta una vez simplemente por el hecho de estar cómodo donde uno esta, pero el problema es cuando toda tu vida es una interminable busqueda de comodidad y falta de ideas nuevas, eso si es lo que hace al mundo un lugar tan horrible (bueno, quizás no sólo esto, pero este tema aporta bastante). La falta de ganas y de espectativa por lo que vendrá hace que seamos gente desganada y que siempre tenga ganas de hacer menos de lo que hace.


Pero volviendo al punto de nuestras propias vidas, que sin duda es el disparador de todo lo que viene después. ¿Cuál es el punto de vivir una vida que no queremos vivir, por más cómoda que sea? Y aca está el verdadero kit de esta cuestión. Realmente no queremos movernos para buscar una vida mejor, o tenemos miedo de que si lo hacemos no podamos llegar a conseguirla. No nos engañemos muchachos, todos tenemos miedo cuando de alcanzar nuestros sueños se trata, no es novedad y no serían sueños tan valiosos si fuese de otra manera. Si son realmente nuestras expectativas y nuestras añoranzas, es lógico que tengamos miedo de no alcanzarlas. Pero no podemos vivir otra vida porque tenemos miedo de intentar conseguir lo que queremos y fallar. Va, en realidad, si podemos hacer esto. Incluso hay infinidad de gente que lo hace todos los días, que vive una vida vacía, que lo va llevando lentamente a sepultar todas sus aspiraciones y convertirse en una especie de bolsa de plástico llevada por la corriente, sin rumbo y sin esperanza.


Realmente no pretendo sermonear a nadie con esto, simplemente (como en la mayoría de las conclusiones) llamar la atención sobre un tema que, como pasa en mi caso, seguramente está en sus cabezas dando vueltas y quizás, ver la mirada de otro sobre él ayude a empezar a resolverlo o, por lo menos, a empezar a tomar cartas en el asunto y empezar de a poquito a luchar contra la corriente con la esperanza, quizás no tan remota, de ver alguna vez la costa.