En esta columna tenemos una película argentina, un policial, una romántica y una comedia-dramática, lo bueno es que todo esto es dentro de la misma película.
De la mano del, ya podríamos decir, gran director argentino Juan Jose Campanella nos llega esta película que, como pocas, combina elementos del policial, la comedia, el drama y sobre todo el romance. ¿Cómo lo hace? Buena pregunta, vamos a hablar un poco de la historia a ver si les aclaro el panorama al respecto.
En una época actual un abogado visita el palacio de tribunales, entra al despacho de una fiscal ya entrada en años pero que todavía permanece bastante atractiva. Este retirado letrado le viene a su vieja amiga con una propuesta bastante particular, quiere escribir acerca de un viejo caso que nunca fue cerrado.
Al principio la mujer piensa que es una locura de un viejo aburrido, pero poco a poco ella también se va enganchando en el tema. Poco a poco vamos conociendo la historia zigzagueando entre el pasado y el presente que nos va contando el caso pero tambien la vida de estos personajes excelentemente interpretados y que nos permiten develar el secreto que se esconde en los ojos del de cada uno de los personajes.
Con todo esto se da una de esas raras ocasiones, cada vez más raras, en las que podemos llamar a ese conocido, todos conocemos aunque sea a uno, que defenestra sistemáticamente al cine argentino e invitarlo al cine. Se los prometo, no van a quedar mal.
