Ya pasaron tantos años que perdí la cuenta de las excusas que use para justificar mi fanatismo por Harry Potter. Que los libros eran muchísimo más profundos que las películas, que los personajes tienen una vida interior cada vez más oscura que revela magistralmente la ambivalencia entre la oscuridad y la luz del alma, que los leía para levantarme una minita y cosas así. Pero más allá de estas justificaciones vanas, creo que si hoy tuviese que explicar por qué teniendo 27 años soy fanático de las aventuras de un estudiante de magia de 17 años, sin dudar diría que vean la película de esta semana.
El príncipe mestizo es la entrega más lograda de las 6 películas que salieron hasta ahora y es la introducción perfecta para el último libro que será retratado en las dos películas siguientes. Pero más allá de mí mirada un poco parcial al respecto les propongo contarles un poco de que trata todo esto.
El que no debe ser nombrado ah regresado y la batalla entre el bien y el mal tendrá lugar una vez más. Con esto nos quedamos de la anterior peli, en esta comenzamos obviamente con Harry que ah transcurrido un extraño verano, y con los mortífagos atacando indiscriminadamente el mundo mágico y también el de los muggles.
Ya poco falta para que el año escolar vuelva a comenzar cuando Dumbledore aparece (literalmente) frente a Harry y lo lleva a ver a un viejo amigo de él esperando que la fama de Harry lo ayude a reclutarlo. Después de esta pequeña excursión el barbudo mago transporta a nuestro joven protagonista a un lugar más familiar. Es allí cuando Harry vuelve a “La Madriguera” y se reúne con Ron y Hermione. Con sus dos amigos cerca Harry ya empieza a palpitar un nuevo año en Hogwarts que se augura muy diferente a los anteriores.
Realmente un muy buen resumen del libro que seguramente dejó mella en gran parte de los lectores de la serie y que se convirtió en una peli que tendrá el mismo impacto en sus seguidores. Si venís siguiendo la saga ni te tengo que recomendar que vayas y si tocas de oído con este tema pero tenés ganas de dejar atrás los prejuicios y meterte en la historia yo te recomendaría que corras a ese viejo videoclub de tu barrio que aun resiste los embates del tiempo y organices una de estas tardes de invierno una maratón del mundo del joven mago.
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